Galería Vértice

ÍÑIGO CALLES conoce la fotografía de mano de su padre, y se interesa a fondo en ella apenas cumple los veinte años, coincidiendo con su etapa universitaria. Autodidacta en este primer período de aprendizaje, practica técnicas de conservación fotográfica como la goma bicromatada, al tiempo que desarrolla en casa su propio laboratorio, para trabajar, básicamente, en blanco y negro.

Vive doce años en Lanzarote. La luz atlántica, la belleza volcánica y su gran afición por la náutica, marcan, con pasión, su primer período productivo. Durante esa época expone en su ciudad natal, San Sebastián, en la sociedad fotográfica de Guipúzcoa, y en Lanzarote, en la galería cinema (paisajes e imágenes foto-gráficas de Lanzarote), que se alternan con reportajes realizados para la revista yate y motonáutica, centrados casi todos en su viaje en velero, durante dos años, por los mares caribeños y caboverdianos.

Su segunda época tiene que ver con la llegada a Asturias en 1993, tierra en la que fija su residencia. Es a partir de entonces cuando participa en el taller experimental de Humberto y en el cuaderno de campo de Joan Hernández Pijuan. En el 2002 decide que la fotografía sea el centro de su actividad principal.

Utilizamos cookies propias y de terceros para analizar su experiencia online y mejorar nuestros servicios. Si continua navegando, consideramos que acepta su uso.

OK · Más información