MIGUEL GALANO expone por cuarta vez de manera individual en la Galería Vértice de Oviedo. La muestra se inaugura el Jueves, 29 de septiembre, a las 19:30h.
Desde su licenciatura en la Escuela Superior de Bellas Artes de San Fernando, han sido muchos los galardones conseguidos por el pintor asturiano, entre otros, el II Premio Fundación Díaz Caneja de Palencia, la Beca Endesa, la Pámpana de Plata del Certamen de Valdepeñas de Pintura, el I Premio Internacional de Pintura de la Fundación Laboral de la Construcción del Principado de Asturias, el Premio Ángel de pintura, etc.
Participa habitualmente en exposiciones individuales y colectivas, tanto nacionales como internacionales. Asimismo hacemos mención a su participación en algunas de las ediciones de la feria internacional de arte contemporáneo Arco-Madrid, con la Galería Vértice.
Su obra forma parte de numerosas colecciones públicas y privadas: Museo de Bellas Artes de Asturias, Fundación Príncipe de Asturias, Museo Español de Arte Contemporáneo, Colección Casa Real Española, Biblioteca Nacional, Colección de arte Unión Fenosa, Colección Fundación C. Masaveu…
Con motivo de esta exposición, se ha editado un catálogo con texto de Andrés Trapiello y la reproducción de las obras.
CARTAGENA DE INDIAS
Después de siete años (la última individual fue en noviembre de 2004) vuelve Miguel Galano a la Galería Vértice. Pintor lírico, intenso, concentrado, que ha sabido construir, frente al ruido de la época, un universo aparte. Pintor-poeta, de aquellos a los cuales, para decir el misterio del mundo, les bastan muy pocas cosas. Pintor del norte -El Norte fue el título de su exposición retrospectiva presentada en el Museo de Teruel en el 2003- al que con frecuencia hemos asociado al occidente asturiano y a la vecina Galicia, y que con el tiempo ha incorporado nuevas geografías. De Praga, Copenhague, Budapest o Cracovia nos llegaron sus visiones a través de parques nevados, edificios antiguos, pequeñas plazas o farolas solitarias en la oscuridad de la noche.
Sin embargo en esta ocasión nos lleva a un paisaje más lejano, distinto, contrario casi, al otro lado del atlántico: Cartagena de Indias. “No sabemos las razones por las cuales acabó Galano en Cartagena de Indias, pero sí podemos sospechar las que lo llevaron a retratarlo, porque Galano retrata lugares, les busca el alma y hace que esta les venga al rostro” comenta Andrés Trapiello en la presentación del catálogo. Nos esperan, pues, antiguas casas coloniales, un cielo más azul, un altar –nuevamente- y sobre todo una naturaleza fresca y exuberante, repleta de palmeras. Una pintura distinta, la misma siempre.